EL DOLMEN DEL ESPARTAL Y ¿UN PEQUEÑO MENHIR?, EN VILLAR DEL REY, BADAJOZ. (Con datos inéditos).

En la bella dehesa extremeña, en el término de Villar del Rey y en la finca de su mismo nombre se encuentra este dolmen y no lejos de este lo que podía ser un pequeño menhir.

El dolmen conserva 13 ortostatos de los cuales 11 pertenecen a la circunferencia de la cámara y los otros 2 restantes también podían ser de esta cámara pero posiblemente movidos, pues los 13 se encuentran en pié aunque algunos están partidos, también hay alguna piedra grande junto a estos que podía pertenecer al corredor, de la cubierta no sabemos nada podia ser un dolmen de falsa cupula, pero no descarto que esté enterrada dentro de la cámara, desde una cierta distancia se observa el túmulo de tierra en un estado casi perfecto, en una zona relativamente llana.

Al igual que dije en el dolmen del Costuron, la arqueóloga María Cleofé Rivero debe tener información de este dolmen pero me pareció que no quisiera soltar prenda de nada, fue muy recelosa el día de mi entrevista con ella.

Referente al pequeño menhir, es evidente que es una piedra levantada por la mano del hombre, pero nos sorprendió mucho, lo que parece podía ser, que tiene dos caras trabajadas, quizás sea brechas de la misma roca de granito, pues están muy burdas y nada matizadas, nos planteamos si podía ser una piedra de esas que se colocan para delimitar terrenos pero esas son un perfecto ortoedro levantado con sus 6 caras perfectamente trabajadas, pero esta se encuentra dentro de la misma finca, o quizás fuese para señalizar algo, podía ser de cualquier época también y está cerca del dolmen, no me atrevo a decir con seguridad que es, es todo un misterio.

Con mi amigo Joaquín Larios Cuello.

José Antonio Hinchado Alba.


(1968). María Cleofé Rivero de la Higuera:  (Hablando del dolmen de Leoncillo 1). En cuanto a la planta, este megalítico difiere de los excavados hasta ahora en las tierras limítrofes: La Roca, Valencia de Alcántara, y los tres que recientemente he excavado en el pueblo de Villar del Rey, bajo la dirección del profesor JORDÁ. Pero es curioso observar que si bien coincide en la planta, difiere en el corredor, formado como se sabe por piedras de menor tamaño que las de la cámara, cosa poco frecuente en Portugal y en los dólmenes españoles más próximos a éste. Los Leisner creen que esta característica constructiva del corredor es propia de antes de la época de bronce. 


(2002). Antonio Bueno Teodoro: La Profesora María Cleofé Rivero de la Higuera, en los trabajos de investigación y catalogación, que ha realizado en el término de Villar del Rey y sus proximidades nos dice: Villar del Rey y sus contornos estuvieron habitados desde el Neolítico (en el año 3.000 al 2.000 antes de Cristo), es probable que mucho antes. Estas afirmaciones se justifican por los monumentos megalíticos hallados en las proximidades del pueblo, como el dolmen de Peña Hincada, situado al Este del núcleo urbano en el paraje conocido por Cerro de La Espinosa, del cual sólo se conservan las piedras verticales hincadas en el suelo. El dolmen de la finca Leoncillo situado también al Saliente del núcleo urbáno en un bello paisaje; los sepulcros de corredor de El Costurón, y el del El Espartal por el Suroeste, todos excavados por María Cleofé Rivero. El material encontrado en las excavaciones le permiten afirmar que estos monumentos megalíticos datan de la fecha del Bronce (2000 al 1500 años antes de Cristo). También dice que hay otros pendientes de excavación. 


(2016). José María Murillo González: El conocimiento que tenemos de los contenidos de estas tumbas es muy limitado debido a la escasez de intervenciones arqueológicas, la mala conservación de los restos y los frecuentes expolios. Según la información consultada, en nuestra área sólo han sido excavados arqueológicamente siete de estas sepulturas: Cueva del Moro y Cueva del Monje (Almagro Basch, 1965); El Costurón, El Espartal, Peña Hincada y Leoncillo I (Rivero de la Higuera, 1969, 1970); y finalmente Cabezo Marruecos (Rubio Muñoz, 2002)... .

... En nuestras visitas hemos podido registrar un fragmento amorfo de cerámica elaborada a mano en El Espartal y un trozo de molino de vaivén de granito en Mayorga IV.

La porción de terreno teóricamente visible desde cada tumba (que a grandes rasgos coincide con aquella desde la que la tumba es divisada) es muy variable en cada caso, ... Tal disparidad coincide con la diversidad de inserciones paisajísticas que presentan: unas tumbas se sitúan en terrenos llanos o suavemente alomado (por ejemplo: El Espartal, los de Mayorga o los de Rivera de Albarragena), ... .